Esta clase de factores se reducen a tres. Genotipo, Fenotipo, Paratipo: (Herencia, Educación y circunstancias). Del perfecto equilibrio entre estos tres factores, deviene entonces la conducta social del individuo.
Cuando existe desequilibrio en estos tres factores, entonces el resultada es el delito. Estos tres factores pueden ser positivos, o negativos. Son positivos cuando se traducen en recto pensar, recto sentir, recto obrar.
Son negativos cuando se traducen en pensamiento criminoso, sentimiento criminoso, hechos criminosos.
Vamos a estudiar los tres factores por separados.
Herencia. La herencia es el vehículo del Karma, Némesis, o Ley del Destino. Aquí no se trata de creer o de no creer lo que necesitarnos es analizar y explorar profundamente los distintos transfondos de la mente.
Aquello de que si creo y de no creo es propio de gente ignorante. Nosotros somos matemáticos en la investigación científica, y exigentes en el análisis y en la expresión.
La muerte es una resta. Terminada la operación aritmética, solo quedan los valores que continúan.
Esos valores constituyen, el yo psicológico, el mi mismo, el ego que se reencarna para satisfacer sus deseos frustrados, y para continuar con otra personalidad.
El yo es un manojo de recuerdos, pasiones, deseos, odios, violencias, lujuria, codicia, etc., etc. El yo son los valores. Esos valores energéticos son anteriores a la célula seminal primitiva. Si examinamos todos los estados intra-atómicos e interatómicos de la célula seminal primitiva, solo encontramos electricidad y magnetismo. No estamos sentando dogmas. Hagamos la prueba, llevemos la célula seminal a un laboratorio de física atómica. Si fraccionarnos el átomo de la célula seminal primitiva liberamos energía, porque según la física atómica cada átomo es un exponente de energías.
Si un clarividente científico analizara luego esas energías liberadas del átomo de la célula primitiva, hallaría entonces el ego reencarnante. (Los valores).
La existencia comienza en la célula elaborada en los testículos y próstata del hombre, decapitada luego al entrar en el óvulo materno.
Los factores de la herencia están en los mismos Genes. La palabra Gene deviene de la misma raíz griega de la cual nacen las palabras génesis, generar, género, etc...
Estos genes están dentro de esa especie de forma varillas llamadas cromosomas. En los genes está la herencia paterna y materna.
La herencia es el vehículo del cruel Némesis de la vida.
La herencia es el resultado de Karma (Ley de acción y consecuencia. Némesis).
Con la vara que midiereis seréis medido”. “Tal acción tal consecuencia”. Esa es la Ley.
En la herencia llevamos el resultado de nuestras malas acciones. Hablando axiomáticamente decimos: Las malas acciones son la causa Causorum de la herencia.
Este Axioma solo se comprende cuando entendemos la Ley de la reencarnificación y del Némesis (Karma).
Los valores de un hombre que fue artista podrán reencarnificarse en una familia de artistas que le proporcionen la herencia que él, necesita.
Una suma de valores místicos se reencarnificará entre gente piadosa.
Los valores de un libertino podrán reencarnarse entre familia libertina y los de asesino entre asesinos y ladrones. Muchas veces se han dado casos de santos entre bandidos y viceversa. Esa es la Ley del destino ajustando cuentas.
En el subconsciente llevamos toda esa herencia. Los factores de la herencia nos traicionan muchas veces.
Educación. Analicemos ahora a la educación. Este segundo factor del subconsciente es de suma importancia.
La educación comienza en el hogar. El niño aprende más con el ejemplo que con el precepto.
El niño presencia en los hogares modernos, el adulterio de sus padres. El niño es testigo presencial de la ira, de la codicia y de la lujuria de aquellos que le dieron la vida.
El niño en el hogar ve con asombro el revólver o la escopeta de su padre y la revista o los cuentos de asesinos y ladrones.
El niño va al cine donde se goza con balazos, detectives y bandidos salteadores de caminos y de bancos. Cuando llega la noche de Navidad o las fiestas de Reyes Magos. El niño recibe de regalo cañones, revólveres y pistolas de juguete para que juegue a bandidos, o a salteador de caminos.
Todo eso va quedando almacenado en el subconsciente del niño.
Sus mismos padres lo van envenenando poco a poco con el veneno fatal de la delincuencia.
Pasa el tiempo, el niño crece y las ideas del crimen depositadas en el subconsciente, se desarrollan, evolucionan y progresan, aunque la parte vital consciente ignore todo lo que pasa en las profundas regiones del subconsciente. Un día cualquiera el fruto está maduro, y la cosecha es el delito. Todo lo que siembra en el subconsciente aflora en la mente a través del tiempo. La reacción situacionaria de un homicida que jamás quiso matar, es el resultado fatal de todo aquello que aprendió cuando era niño.
El nuevo Ganster, el salteador, el ladrón nuevo que antes era un honrado ciudadano, son el resultado de una falsa educación.
Las novelas pornográficas y las películas eróticas engendran prostitusión, seducción y raptos con fuerza y violencia, etc., etc.
Los artistas de cine, y los escritores pornográficos, están envenenando el subconsciente de niños y adultos.
Ha llegado la hora de luchar contra la corrupción moral de las prostitutas de la inteligencia.
En la escuela el niño aprende historias sangrientas que se graban en el subconsciente, astucia, malicia, desconfianza, etc. Todo eso se graba en el subconsciente. Y el resultado fatal es el delito.
Circunstancias. Vamos a estudiar las circunstancias: ciertas circunstancias críticas irritan el subconsciente provocando reacciones criminales.
Circunstancias objetivas se combinan en el subconsciente con circunstancias semejantes para provocar el delito.
Las imágenes objetivas y subjetivas se combinan para el delito. Por ejemplo: Un hombre sin trabajo lleno de hambre y miseria, recuerda haber visto en su infancia a su padre en la misma crisis. Viene a su memoria cuando el padre asaltó a una persona en la calle para robarla, Se acuerda de la buena comida que se sirvió en su casa después del atraco, etc. Entonces la circunstancia crítica en que se halla el hombre sin trabajo, y la circunstancia subjetiva del recuerdo, se combinan para provocar el crimen.
Los tres factores Genotipo, Fenotipo y Paratipo son la Psicogénesis de todo acto criminoso.
Solo con una cultura integral se logra extirpar el delito desde sus más Intimas raíces. Solo con cultura integral podemos vivir autoenaltecedoramente. Solo con el ejemplo dignificante podemos acabar la delincuencia social.
El clarividente subconsciente solo percibe la historia de la raza humana a través de los siglos. En el subconsciente viven los recuerdos. de todas nuestras pasadas reencarnaciones. Muchas veces un clarividente subconsciente viendo un recuerdo, ha caído en el crimen. Por ejemplo puede darse el caso de que un clarividente vea a su virtuosa y fiel esposa adulterando. El clarividente está seguro de su visión, sabe que la palabra alucinación ha sido inventada por los ignorantes para disfrazar su propia ignorancia. Sabe que la visión existe.
Si el clarividente es un hombre inculto sin disciplina intelectual de ninguna especie reaccionada de acuerdo con su Yo Psico-Bio-Tipológico.
Un Neurastenoide la asesinará villanamente después de calumniarla e injuriarla vilmente. Un Paranoico proyectará intelectualmente un crimen inteligentísimo. Un Epileptoide reaccionará instantáneamente con un brote explosivo de cólera brutal que después de quebrantar la superestructura Fenotípica de control personal creada por los hábitos sociales y la Educación, la llevará hasta el asesinato de su virtuosa y fiel esposa. Un Oligofrénico podría cometer un asqueante y horripilante crimen en esa forma asesinaría a su fiel esposa. Un Esquisofrénico la abandonaría inmediatamente. Un Sádico-Masoquista la asesinaría durante el mismo acto sexual; o después de ello. Estos son los peligros de la clarividencia subconsciente. El clarividente no duda de la visión. Sabe que esa no es una alucinación.
Si el clarividente subconsciente no estudia Psiquiatría, Teosofía, Psicología, Rosacrucismo, etc., etc. Puede caer en los más horrendos crímenes. Esa fiel esposa de nuestro ejemplo pudo haber sido adúltera en una pasada reencarnación, y entonces el clarividente sin disciplina ni cultura intelectual, ignora lo que es el pasado y el subconsciente El resultado de su ignorancia y falta de cultura es el crimen, la calumnia pública, etc., etc.
En muchas escuelas espiritualistas los clarividentes subconscientes desollan vivo al prójimo, calumnian a los inocentes, los acusan de brujería, hechicería, magia negra, adulterio, robo, estafa., etc. Nadie se les escapa a todos los calumnian. Es curioso ver a esos orgullosos ignorantes presumiendo de sabios, profetizando infamias, atormentando al prójimo, acusando a los buenos ciudadanos porque en el viejo pasado de sus vidas antiguas los vieron cometiendo errores que hoy serian incapaces de cometer. El Código Penal es también para los videntes calumniadores.
Constantemente oímos a esos clarividentes decir frases como estas: Fulano de tal es Mago Negro y me está trabajando. La señora tal está adulterando con el caballero, tal, aún cuando la calumniada esposa sea una santa. Nada respetan esos videntes ignorantes. Sin embargo no podemos culpar a la clarividencia. Realmente el sexto sentido es tan natural y normal como los ojos, los oídos, el olfato, la boca, el tacto.
La culpa de estos errores no es la clarividencia. La causa de todos esos errores la falta de cultura intelectual y de respeto al prójimo.
En el subconsciente viven los recuerdos de todos aquellos errores que cometimos en las antiguas reencarnaciones. El clarividente sin cultura ve todos esos errores del pasado y entonces se confunde y calumnia a personas justas y honradas.
El clarividente culto, el clarividente intelectual que ha estudiado Psiquiatría, Psicología, Teosofía, Rosacrucismo, etc., etc. No cae en semejantes errores porque tiene disciplina intelectual. El clarividente culto, educado, respetuoso y disciplinado intelectualmente goza de intelección iluminada, y sabe leer en el subconsciente de la naturaleza, a plena conciencia.
Entonces es capaz de estudiar retrospectivamente toda la historia de la tierra y de sus razas. Es un iluminado clarividente.
Nociones fundamentales de endocrinologia y criminologia
Samael Aun Weor