En este mundo no vemos las cosas tal como son, sino las imágenes de las cosas.
En Chesed se sabe cuántos átomos tiene una mesa, cuánto Karma debe el mundo, se sabe cuántas moléculas viven en cada cuerpo, es un Mundo de Matemáticas, el Mundo Realista; en este Mundo se cree uno que va a estar apartado de la realidad del mundo y ahí se vive en la Realidad. En un templo se sabe qué cantidad de gente está Auto-Realizada y quienes no. Si se mete uno a una cocina se sabe qué cantidad de átomos tienen los alimentos que nos vamos a comer. Es un Mundo Terriblemente Realista. En el Mundo de Chesed se viene a saber quién es Hombre de verdad.
Una noche que estaba en el Mundo de Chesed, penetré en un teatro, ahí se balanceaban Karmas, y en una pantalla, que es la de la creación se vio cómo pasaron los Maestros del Karma y en una gran balanza se colocó el Karma de las dos potencias más grandes del mundo, uno en cada platillo, y la balanza se inclinó en contra del Coloso del Norte, debe un gran Karma, va en declive, va a caer fulminado, porque lo que se debe hay que pagarlo en cualquier forma.
Los Teósofos hablan de Planos y Sub-Planos y éstos son los Diez Sephirotes. Diez Emanaciones de la Eterna Madre Espacio, Diez Oleadas que sirven de Fundamento a la Gran Madre.
Los Siete Planetas del Sistema Solar son los Siete Sephirotes y el Triuno Sol Espiritual es la Corona Sephirótica.
Estos Shephirotes viven y palpitan dentro de nuestra Conciencia y tenemos que aprender a manipularlos y combinarlos en el maravilloso laboratorio de nuestro Universo Interior. Gracias a los Sephirotes se puede uno transformar en Hombre; también hay Sephiras; así como hay Iones Positivos hay Iones Negativos.
Necesitamos realizar esos Diez Sephirotes porque están aquí con nosotros, aquí y ahora. Esos Diez Sephirotes realizados en un individuo le convierten en un Auto-Realizado, parecen gemas preciosas incrustadas, es algo maravilloso.
Tarot y Kabala
Samael Aun Weor
Vocalizemos y meditemos diariamente, hagamos retrospeccion diaria.
con constancia y disciplina se logra penetrar al mundo real de los
numeros, al Mundo de Chesed.